El tratamiento correcto

Un tratamiento de dos fases
La piel necesita agua y lípidos varias veces al día (aún cuando no hay lesiones) de manera de restaurar la barrera cutánea natural que nos protege de los alergenos. Por períodos, las cremas con corticoides reducen efectivamente las lesiones. Prescriptos por un dermatólogo, estos tratamientos mejoran la calidad de vida de un paciente atópico, cuando se utilizan correctamente.
Las cremas emolientes para luchar contra la sequedad y restaurar la barrera natural
Estas cremas deben ser aplicadas varias veces al día en zonas no inflamadas. Estas luchan contra la sequedad y calman la piel, reduciendo la picazón. Esta rutina diaria también se recomienda para prevenir los brotes. Aplicar la crema aún cuando la piel se ve saludable.
Las cremas con corticoides para detener la inflamación.
Durante los brotes, las cremas con corticoides se deben aplicar en la zonas inflamadas de manera de calmar y reducir el daño y la picazón. En algunos países la cortisona no es popular debido a sus supuestos efectos secundarios: retención de agua, trastornos del sueño, etc. Sin embargo, estos fenómenos sólo se refieren a los corticoides por vía oral. Cuando son de aplicación tópica, en crema, la cortisona queda en la superficie de la piel. Sin embargo, la cortisona no debe aplicarse en áreas sin lesiones, dado que afina la piel y la puede debilitar.
El doctor puede agregar algún tratamiento antihistamìnico a las cremas en el caso de ser, además, un paciente alérgico.
Las bases del tratamiento para mejorar significativamente la condición de la piel
Negándose a renunciar al tratamiento
Cerca de 2/3 de los tratamientos prescriptos en el eczema no son utilizados o son abandonados antes de tiempo, a pesar de ser la solución más eficaz contra la sequedad severa y las lesiones inflamatorias.
El miedo a las cremas con corticoides o la falta de atención a la reaparición de nuevos eczemas pueden desencadenar un eczema crónico generalizado.
Es importante pedir ayuda cuando se está luchando para hacer frente a su condición o si el tratamiento no es eficaz.
Los dermatólogos ayudan a los pacientes a entender el tratamiento y pueden ajustarlo para mejorar el seguimiento.
No dudes en mostrar a tu dermatólogo cómo aplicás la crema para asegurarte que la técnica es la adecuada para la condición de tu hijo.
La cura: un entorno dedicado al cuidado
Este tratamiento se basa en la provisión diaria de agua termal por parte de profesionales. Como el tratamiento dura más de 3 semanas, abre una enorme posibilidad de bienestar. Desde que el Centro Termal de La Roche-Posay abrió en 1905, ha tratado más de 415.000 pacientes. Recibe alrededor de 8.000 pacientes al año y el eczema es una de las principales patologías tratadas en el centro (33% de los pacientes que ingresan)
Además de la prescripción de baños, duchas y rocio de agua termal con beneficios dermatológicos, los pacientes (y sus acompañantes) tienen la oportunidad de interactuar con otros y relajarse, que es por lejos, uno de los beneficios extra.